Gracias Dios por un año más de vida de mi hijo, es una alegría verle tan feliz, tan crecido, con salud y convirtiéndose en una hermosa persona. Hoy festejaremos todos los cambios que está haciendo, todo lo bueno que nos dio la vida desde que el llego.
Como ya saben, ¡todos nuestros seres queridos están invitados a unirse a la celebración!
Este año recibí tantas bendiciones que se me hace imposible no agradecerte, Dios, ¡Gracias por uno de los mejores años de mi vida! Por hacer que este día fuera maravilloso en cada posible forma, por recibir tantos hermosos deseos de las personas menos imaginables, y por guiarme a lo largo de mi vida.
Agradezco a todas esas personas que forman parte de mi vida, y que, en el día de hoy, en que cumplo un año más, y no puede ser mayor mi felicidad, han estado conmigo para compartirla.
Guardo todo vuestro cariño en mi corazón, ¡que me dará fuerzas y energía en este nuevo año que comienzo!
Creo que este ha sido el año de mi vida en que más felicitaciones de cumpleaños he recibido. Como ya sabéis todos aquellos que me conocéis, no soy una persona de muchas, pero en este caso, si que me gustaría deciros que siento un profundo agradecimiento, y es que… ¡habéis hecho que me emocionase!