¡Feliz cumpleaños, hijo! En tus ojos veo futuro, veo ganas de no parar de aprender, de alegría y de curiosidad, y espero que todas estas características, no las pierdas nunca. Hoy haces un cambio de edad, y eso traerá consigo más madurez y más libertad.
Hijo mío, muchos son los años que llevas viviendo de forma independiente, y eso es algo de lo que me enorgullezco inmensamente, de verte hacer tu vida, de mirar como has construido tu camino, y como te dedicas a aquello que te hace feliz.
Hoy, que cumples un año más y que es un día de magia e ilusión, quiero desearte otros 365 días de plenitud y de seguir siendo tal y como eres. ¡Feliz cumpleaños!
Hijo mío, aquí está tu mamá, como cada año, preparando para ti el mejor día, dándote todo su cariño, y demostrándote que eres su niño preferido, pues no lo olvides nunca, eres la persona por la que me desvivo.
Estoy orgullosa, y siento una gran felicidad, las emociones de hoy son hermosísimas, pero lo más lindo de todo es verte a ti. La forma en que disfrutas de cada sorpresa, la alegría con la que recibes a tus amigos y amigas, tu cara emocionada al soplar las velas y pedir un deseo…
La verdad es que no puedo quedarme con un solo momento, pues cada uno de ellos hace que el día de hoy sea uno de los más maravillosos. ¡Feliz cumpleaños!
Hijo, en días como hoy extraño tenerte en mi barriguita y sentir tus constantes patadas. ¡Todavía no me creo que algo tan perfecto haya estado dentro de mi! ¡Feliz cumpleaños a mi gran bendición!
Verte crecer me hace sentir mucho orgullo, me enseñaste muchas cosas ¡Y aún lo continuas haciendo! Espero que Dios mantenga siempre nuestra conexión madre e hijo y tengas la confianza de venir a mi siempre que lo necesites.
Hijito mío, tu mamá está aquí para hacer de este día el mejor, para hacer que recuerdes este cumpleaños de manera muy especial, así que cuidaré todos los detalles, pues eres chiquito, pero estás comenzando a darte cuenta de la importancia de este día y quiero que tengas los mejores recuerdos. ¡Muchas felicidades!
Mi día se llena de alegría hoy, hijo, pues cumples un año más, y es siempre un momento importante y especial. La vida es diferente sabiendo que tu existes, me cambiaste por completo, y el amor que siento por ti es inmenso.
Mi objetivo en la vida desde el momento en que naciste fue el de cuidarte, el de mantenerte a salvo, lejos de cualquier mal, que crecieras sano, con alegría, y con todas las facilidades. Espero que hayas sentido ese cariño y ese cuidado, y que lo sigas sintiendo para siempre, porque es muy puro, real y sincero.
¡Has crecido tanto! Te miro y veo una persona muy madura e independiente, a pesar de que sigues manteniendo tu hermosa sonrisa de toda la vida, y la mirada bondadosa de cuando eras chiquito. ¡Espero que no lo pierdas nunca!
Ser mamá es una alegría teniéndote como hijo, y hoy es el día más divertido del año, pues creces un poquito más, y estás en una edad en la que todo te hace mucha ilusión, pero sobretodo que llegue el día de hoy. Tendremos una linda celebración, con todas tus ideas, con mucha magia y diversión.
¡Muchas felicidades, hijo! Hoy le doy gracias a la vida, una vez más, por darme la oportunidad de ser tu mamá. Desde que naciste, todo en mi vida cambió, aquellos pensamientos que tenía como seguros, se transformaron en otros, pues tu llegada me enseñó tanto.
Espero que disfrutes de la celebración que tengo para ti hoy, la he preparado con mucho cariño, y a parte de la familia, estarán también muchos amiguitos. ¡Sigue creciendo tan feliz, pues haces hermosos todos mis días!