Hola querida cuñada, te mando millones de besos en este día tan especial para ti. Deseo que la felicidad sea la que guíe tu rumbo por y para siempre.
Eres una de esas personas que siempre da lo mejor de sí misma, y eso es algo que jamás te hará daño ni a ti, ni a nadie. Al contrario, es un privilegio que tenemos todos aquellos que te conocemos bien.
¡No dejes de ser nunca como eres, cuñada del alma!