Con la tristeza de alguien que perdió para siempre a quien quería, pero con la alegría de quien tuvo a alguien maravilloso en su vida, te digo, feliz cumpleaños.
Aún recuerdo la última vez que festejamos tu cumpleaños, y hoy llega otra vez, pero tú ya no estás aquí, así que espero que este mensaje te llegue al cielo. Muchas felicidades.
Si aún estuvieras entre nosotros festejarías este cumpleaños hasta el último segundo, por eso creo que es importante que, aunque ya no estés, te diga, ¡muchas felicidades!