Poemas de Cumpleaños para mi Hija


Encontradas 37 felicitaciones de cumpleaños:

Hija mía,
es la primera vez
que escribo un poema,
pero por este hermoso día
quería sorprenderte
con algo especial y diferente,
porque la ocasión lo merece, 
¡cumples un año más!

Sigues creciendo,
sigues aprendiendo,
sigues sabiendo cual es tu lugar,
descubriendo que necesitas
para ser feliz,
guardando en tu corazón
hermosos recuerdos 
que te acompañarán
en cada uno de tus días,
demostrándome que eres fuerte,
valiente y muy resistente, 
y que yo de ti también puedo aprender.

¡Feliz cumpleaños, hija!
Un poema para mi hija
Que yo seguiré aquí
¡Feliz cumpleaños, hija!
Con las palabras de este poema
quiero transmitirme 
mi opinión más sincera.
Y es que creo que
esta vida está
para disfrutarla con alegría
y eso es lo que creo
que debes hacer tú
en este hermoso día.

Ríe con tus amigos, 
agradece por lo que tienes, 
piensa en todo lo bueno
y aprende también de lo malo, 
aprovecha las oportunidades
¡y sigue siempre hacia adelante!
¡Feliz cumpleaños, hija!
Tú eres mi amor, mi niña,
la alegría de mis ojos,
y día a día llenas mi corazón
con más y más felicidad.

Te quiero mucho
y poder ver tu sonrisa
es el mejor regalo
que recibí en la vida.

A Dios le doy gracias,
por haberme dado
una hija tan maravillosa,
tan linda y especial.

Y a Él le pido que
para siempre te cuide,
te proteja y te bendiga
con una vida feliz,
con salud y mucho amor.
Hija mía, hace unos años
que dejaste de ser una niña,
fuiste demostrando gran valentía,
también que eras independiente,
y que podías valerte por ti misma.

Hoy cumples un año más,
y admiro todo lo que haces,
la persona que eres,
aquello en lo que te has convertido.

Eres un orgullo de hija,
te lo digo y te lo repito,
que llegarás donde quieras
pues lo tienes todo,
y yo siempre estaré a tu lado,
para darte mi mano.

¡Feliz cumpleaños!
Mi niña preciosa, 
¡Feliz cumpleaños!
Gracias por ser 
la hija perfecta.

Desde que naciste
te robaste corazones
y el mío fue el primero. 

Te deseo un día precioso
tanto como tu, aunque 
eso es imposible. 
Para mi es difícil explicar
lo que siento este día, 
pero trataré de hacerlo 
porque eres mi niña linda. 

Veo como creces
y me invade la nostalgia, 
¡El tiempo pasa muy rápido
y yo lo quiero detener!

Espero siempre recuerdes 
lo mucho que te amo,
y que desde que llegaste 
mi mundo cambió para mejor. 

¡Feliz cumpleaños, hija! 
Hoy tengo unas palabras 
para compartir,
porque estoy muy feliz,
festejando por el cumpleaños
más importante de todos,
¡el de mi querida hija!

Eres sinónimo de vida, 
de luz, de esperanza y de alegría,
tu llegada fue mágica 
así como lo fueron 
todos los días
desde que naciste, 
desde que te tuve 
por primera vez
en mis brazos.

¡Muchas felicidades!
¡Muchas felicidades, hija!
Vamos a brindar por
tu maravillosa vida,
porque eres
una mujer muy linda,
por ser tan luchadora
e incansable,
por haber ganado mil batallas
y alcanzado muchos
de los sueños
que tenías
cuando eras niña.
Sabes que puedes
con todo aquello
que te propongas.
El sol, tan hermoso
como siempre,
apareció hoy
para hacer
aún más bello este día,
¡el cumpleaños de mi hija!

Tantos recuerdos llegan
a mi mente:
cuando te tuve en brazos
por primera vez,
cuando también
por primera vez,
me miraste con
tus lindos ojitos,
y me sonreíste…
Cada año, y cada vez
que has ido soplando
las velitas del pastel.

Cada momento
ha sido emocionante
y hoy será uno más.

Soy feliz, pues
la vida me dio
la oportunidad
de tenerte,
¡eres lo más valioso!
y te cuidaré siempre.

¡Muchas felicidades, hija!
¡Muchas felicidades, hija!
Por otro cumpleaños más,
por poder ver tu
hermosa sonrisa
y disfrutar de tu felicidad,
por verte crecer con salud
y con mucha integridad,
por tu llegada al mundo
que fue la mayor alegría
de toda mi vida.
Por eso y por mucho más,
¡hoy vamos a brindar!
¡Muchas felicidades, hija mía!
Es muy bueno que
haya llegado este día,
en el que siempre
tenemos tiempo
para estar juntas.

Ya sabes lo emocionante
que es para mí
estar junto a ti,
y poder recordar el camino
por el que has pasado
hasta llegar aquí.
Hasta convertirte en
una mujer independiente
y muy valiente.

Quiero que sepas
que aprendo mucho de ti
y que me siento
muy dichosa de tenerte.
Continúa siendo
como eres, siempre.
¡Te amo, hija!
Hoy me detengo por un momento 
para contemplarte, querida hija, 
y es que mucho ha cambiado 
desde la primera vez que te vi. 

La sonrisa sigue igual, 
el brillo de tus ojos también, 
y tus abrazos gigantes 
continúan muy reconfortantes.

¡Pero tu tamaño no es igual!
Estas tan alta como yo, 
y cada día más espectacular. 
¡Feliz cumpleaños, hija mía!
Muchas veces me dijeron 
que mi mundo cambiaría, 
pero yo no me lo creí 
hasta el día en que te vi. 

Le das felicidad a mi vida,
con cada carcajada, 
con cada mirada, 
con cada abrazo. 

¡Feliz cumpleaños, hija!
Le pido a Dios que te cuide, 
y guie cada uno de tus pasos. 
¡Te adoro con todo mi corazón!
¡Feliz cumpleaños, hija!
Nunca cambies por favor,
y continua siendo siempre 
la reina de mi corazón. 

Desde que llegaste supe 
que eras lo que buscaba, 
mi adorada reinita
finalmente vendría.

Desde pequeña fuiste 
muy encantadora,
inteligente y alegre. 
¡Y espero eso continúe 
así toda la vida!

Sabes que te deseo 
todo la felicidad 
que este mundo, 
¡Te quiero mucho!
¡Feliz cumpleaños, hija!
Ya eres una persona adulta,
lo demuestras con cada
paso que das,
y no sabes el orgullo
que yo siento
de verte así,
tan hermosa
y tan feliz
en el camino
que decidiste elegir.

Espero que hoy
sea para ti inolvidable,
que soples las velas
con el entusiasmo
de cuando eras una niña,
como, en verdad, haces
cada año que pasa.

Yo estaré junto a ti
para darte un gran
abrazo y mucho cariño.

No solo hoy,
¡si no toda la vida!