¡Feliz cumpleaños, hija! Ya eres una persona adulta, lo demuestras con cada paso que das, y no sabes el orgullo que yo siento de verte así, tan hermosa y tan feliz en el camino que decidiste elegir.
Espero que hoy sea para ti inolvidable, que soples las velas con el entusiasmo de cuando eras una niña, como, en verdad, haces cada año que pasa.
Yo estaré junto a ti para darte un gran abrazo y mucho cariño.
Por donde voy cuento todo lo que aprendo de ti, pues cada día me sorprendes con algo nuevo, con preguntas que nunca me había hecho. ¡Feliz 5 cumpleaños, hija!
Hija mía, ¡ya tienes los 18! y vamos a festejarlo. Es tú día, uno de los más importantes en la vida, y tienes que disfrutarlo y compartir la alegría de que haya llegado con todos tus seres queridos.
Con los años me has ido demostrando que eres una persona con grandes capacidades, y por ello, sé que llegarás lejos. Hoy te conviertes en una mujer adulta, y sé que tienes la madurez necesaria para enfrentar aquello que la vida te irá presentado. Te amo, mi niña, no olvides que continúas teniéndome para lo que necesites, ¡feliz cumpleaños!
¡Feliz cumpleaños, hija mía! Son muchas las cosas que querría decirte hoy, tantas que no cabrían ni en mil cartas. Eres mi sol, la luz que todo lo alumbra, la alegría de mi vida, las respuestas a todos mis porqués, ¡no puedes imaginar cuanto te adoro!
Hoy haremos de este día el mejor de todos, será especial, mágico y no habrá otro igual. Estoy deseando ver tu linda cara cuando recibas todas las sorpresas que tengo para ti. ¡Te amo!
Los 15 son muchas cosas, pero lo más bonito e inolvidable es que inicias una nueva etapa no solo como mujer sino en tu vida. ¡Y yo te deseo lo mejor en este nuevo camino que te toca recorrer!
¡Feliz cumpleaños, hija! Disfruta este hermoso día al máximo y recuerda que te amamos infinitamente.
¡Feliz cumpleaños, hija! La mayor de tus hermanos, siempre alegre y haciendo a todos el camino más fácil. Deseo que continúes llevando la bondad y el buen carácter que te caracteriza por bandera, pues ya te abrió muchas puertas y seguro que seguirá haciéndolo. ¡Te amo!
Llegas a los 25, hija, pero mantienes el corazón tan joven y puro como cuando eras niña. Me alegra mucho saber que eres de esas personas que con poco son muy felices, y como sé que te gustan muchos las flores te he traído un hermoso ramo.
Recibe esta edad con una gran fiesta, y pide grandes deseos. ¡Feliz cumpleaños!
¡Feliz cumpleaños, hija mía! Siento tanto orgullo de ser tu mamá que es infinito, siento emoción al verte alcanzar tus metas, y siento que la vida se volvió mucho más hermosa cuando te naciste.
Desde ese momento le agradezco a Dios y le pido que cuide de ti, porque eres lo más precioso que tengo, la persona a quien siempre cuidaré y por quien lo daría todo.
Hija de mi alma, desde mucho antes de tu nacimiento te hiciste parte de mí y llenaste mi corazón con tu bonita presencia. Verte crecer tan rápido me proporciona una felicidad gigante y al mismo tiempo un sentimiento de miedo al tener que soltarte y dejarte vivir para que encuentres tu camino.
Sin embargo, me di cuenta de que lo necesario no era dejarte ir sino acompañarte, y aconsejarte en cada paso que dieras. Hoy me doy cuenta que te has convertido en alguien increíble con un corazón inmenso. ¡Feliz cumpleaños, mi amor! Eres una hija ideal por la que le agradezco al cielo todos los días.
Hace algunos años decidiste nacer, y pasamos de ser una pareja a ser papás de una linda princesita. Desde ese día todo cambió, incluso todas las preparaciones de los meses anteriores, servirían muy poco al compararlo con las primeras semanas en que te tuvimos.
Llegaste y contigo comenzamos una nueva etapa en la vida, una que un día te tocará vivir a ti, y esperamos estar presentes, así como tus abuelos lo estuvieron.
Hoy te vemos tan mayor, y nos quedamos perplejos. ¡Eres toda una mujer! ¡Y el orgullo que sentimos se hace más grande con el paso de los años! ¡Feliz cumpleaños, hija! ¡Te amamos!